Esta es una receta sencilla y rápida de preparar, muy buena para aprovechar el arroz blanco que nos ha quedado del día anterior y tenemos poco tiempo para cocinar. Esta, como otras recetas que publicaremos luego, es un ejemplo de aplicación de las 3 R en la cocina, reinventamos una receta, reciclamos un arroz y reducimos el desperdicio.
Ingredientes:
– arroz previamente cocido
– tortillas de huevo (2 huevos por tortilla)
– cebollín
– ajo
– jengibre
– aceite vegetal (2 cucharadas)
– salsa de soya
– brotes de soya (opcional)
Preparación:
– Picar el cebollín en trocitos.
– Pelar el jengibre con una cucharilla y lavarlo. Rallarlo por el lado grueso del rallador y si te gustan los trozos más pequeños, cortarlo aun más con el cuchillo.
-Calentar la sartén, agregar el aceite vegetal y sofreír el cebollín, el ajo y el jengibre, en ese orden.
-Añadir el arroz y remover para que se le incorporen los ingredientes previamente sofritos. Agregar brotes de soya (ingrediente opcional).
-Remover con movimiento envolvente y raspando suavemente el fondo de la sartén.
-Verter salsa de soya, en la cantidad adecuada para saborizar el arroz y regular el nivel de salobridad, al gusto personal. Remover para integrar.
-Cortar las tortillas en trozos pequeños y agregarlos al arroz. Revolver.
Y ya tenemos listo un plato sencillo, nutritivo y diferente al arroz blanco que nos quedó de la comida anterior, con un ligero sabor a comida china.